Precalienta una sartén honda u olla con aceite vegetal a fuego medio-alto. Si tienes un termómetro para aceite, lo ideal es que la temperatura esté en 180°C/350°F.
Agrega el pollo al aceite, siempre con cuidado de no salpicar y alejando a niños de la cocina. Para esto es mejor sumergir el pollo ligeramente y luego soltarlo.
Deja que el pollo se dore bien, va a tomar 3-4 minutos.
Retirar y poner sobre papel absorbente por unos 30 segundos. Si es necesario mantenerlo caliente, la mejor manera de hacerlo es en un horno precalentado a 100°C/210°F sobre una bandeja con rejilla para que la fritura no se humedezca.
Terminar con sal en hojuelas y servir inmediatamente.