Mezcla todos los ingredientes en un bowl. Prueba y ajusta el nivel de sal.
Refrigera la mezcla por lo menos 1 hora o hasta que nuevamente esté firme.
En un poco de film, esparce las semillas. Al centro pon el queso y ruédalo para cubrirlo con las semillas.
Envuelve el queso en el plástico y hazle 3 amarres con hilo en direcciones distintas para marcarlo como si fuera una calabaza. Cuando hagas el nudo, asegúrate de jalar para marcar el queso bien.
Refrigera 1 hora nuevamente o hasta que sea momento de servir.
Sirve el queso y dale un detalle final con la rama de canela y una hojita.