En una olla derrite la mantequilla a fuego bajo. Apenas se derrita agrega el agua y la leche y sube la temperatura a media-alta.
Apenas veas que está hirviendo fuertemente agrega la harina, sal y azúcar y mezcla rápidamente con una espátula. Cuando se haya formado una sola masa retírala de la olla y pásala a un bowl donde puedas batir con una batidora eléctrica o mezclar a mano. Es importante sacarla de la olla para que no se siga cocinando la masa.
La masa se tiene que enfriar por completo antes de agregarle los huevos porque si no se van a cocinar y no van a crecer bien en el horno. Puedes dejarla enfriar sola o usar la batidora a velocidad media para que se enfríe más rápido.
Una vez que la masa esté fría agrega un huevo y mezcla. Si lo haces a mano usa una espátula. Al principio va a parecer como que no se va a unir pero luego de un rato pasará. Si lo estás haciendo con batidora asegúrate de raspar los bordes del bowl continuamente para ayudar a que el huevo se incorpore.
En este momento haz la prueba de la que hablábamos en el post: levanta masa con una espátula y deja que caiga sola. Si cae sin problema y forma una «V» de masa luego de caer entonces ya no necesitas echar más huevo.
Si todavía no llegas a este punto bate un huevo en un bowl pequeño. Agrega alrededor de 1/4 del huevo a la masa y haz la prueba nuevamente. Recuerda raspar el bowl con una espátula para que se mezcle bien el huevo. Repite esto hasta que logres la «V» al caer.
Pon la masa en una manga y haz pequeños montoncitos de 3cm de diámetro sobre una lata de horno con papel para hornear o silpat. Yo uso un cortador y un lapiz para marcar la parte de atrás del papel y así tener una referencia del tamaño y que queden todos igual. Deja unos 4-5cm entre cada montoncito. ¡Crecen harto en el horno!
Con tu dedo humedecido en agua, dale golpecitos a los profiteroles para aplanar la marca que deja la manga. Píntalos con el huevo batido con agua.
Lleva los profiteroles a un horno precalentado a 180°C/350°F por 15-20min, deberían estar ligeramente dorados.
Baja la temperatura a 150°C/300°F y déjalos por 10min más. En todo el tiempo que los profiteroles están en el horno no lo abras porque los profiteroles son muy sensibles y se bajan.
Sácalos y ponlos sobre una rejilla para que se enfríen. No los rellenes calientes porque se va a derretir el relleno y se va a mojar el profiterol.