Poner a hervir el agua con el vinagre.
Romper el huevo y abrirlo en un pocillo pequeño.
Bajar la temperatura del agua hasta que no veas burbujas.
Hacer un remolino en el centro con una cuchara. Acercar el pocillo con el huevo al agua y voltearlo de una sola vez.
Con mucho cuidado detén el remolino de agua para que no se estire el huevo.
Dejar cocinar por 2min o hasta que puedas tocarlo y sientas la clara dura y la yema aún líquida en el centro. Siempre que agregues otro huevo trae a hervor el agua nuevamente para luego bajar la temperatura como hicimos antes.
Cortar y descartar la estela del huevo que es como una cola que se forma porque la clara tiene una parte más líquida. Ponlo primero sobre un plato para que pueda escurrir el exceso de agua.