Pica el pan en cubos de 3cm aproximadamente.
En una bandeja para horno, vierte el pan y mézclalo con el aceite de oliva, sal y pimienta.
Hornéalos a 180°C/350°F por 10-15 minutos o hasta que estén bien dorados. Retíralos y deja que se enfríen por completo antes de usarlos en una ensalada.
Una vez fríos, los puedes guardar en un contenedor hermético a temperatura ambiente por hasta 5 días.