Pelar y rallar el jengibre o kion usando la parte más finita de un rallador o un microplane. Exprimir lo rallado con la mano o usando un colador y nos quedamos solo con el líquido.
Mezclar el jugo con el vinagre, soya y miel usando un batidor.
Agregar el aceite de sésamo en un hilo mientras batimos a la vez para incorporar.
Probar, ajustar nivel de sal y servir.