Poner en una olla el coco, canela y clavos de olor. Tostar a fuego bajo moviendo constantemente hasta que el coco se ponga dorado.
Agregar los 400g de leche evaporada y agua y dejar que hierva por 10 minutos para que tome el olor del coco, canela y clavos de olor.
Agregar la leche condensada, vainilla y maicena disuelta en agua fría y mover hasta que hierva y espese.
Echar 1/4 de la mezcla sobre las yemas y batir rápidamente para que no se cocinen como huevo revuelto. Luego regresar todo a la olla y mover a fuego bajo por 30 segundos para que termine de espesar con las yemas.
Terminar agregando los últimos 200g de leche evaporada fría fuera del fuego.
Colar. Si te gusta la textura del coco puedes regresar un poco del coco rallado a la mezcla.
Poner en moldes individuales o en un molde alargado y dejar congelar por 8 horas.
Para desmoldar sumergir la parte exterior del molde en agua tibia, secar y voltear.