Pela las manzanas y córtalas en cuartos. Luego, con el cuchillo, haz un corte en diagonal para quitar la parte de las semillas de los cuartos.
Corta las manzanas en láminas de 2mm usando una mandolina o cuchillo.
En un bowl, mezcla la harina, sal y azúcar.
Forma un hoyo al centro de los ingredientes secos y vierte ahí la leche y los huevos.
Con un batidor de mano, empieza a mezclar desde el centro de los ingredientes, incorporando poco a poco los ingredientes secos de los bordes del bowl.
Una vez que tengas una masa uniforme, agrega la mantequilla e incorpórala también con el batidor.
Agrega las manzanas, procurando separar las láminas de manzana para que no queden pegadas unas a otras en la torta final.
Mezcla las manzanas con una espátula, preocúpate que quede bien mezclado.
Prepara un molde de 22x11cm con papel para hornear cruzando ambos lados del molde. A mí me gusta últimamente usar clips de metal para mantener el papel en su lugar, pero también puedes aceitar el molde y que el papel se pegue al aceite. Puedes ver esto en el video líneas arriba.
Vierte la mitad de la mezcla en el molde y presiona ligeramente con una espátula para que las manzanas queden de manera horizontal. Repite hasta llenar el molde.
Encima, esparce las almendras laminadas.
Hornea la torta invisible a 180°C/350°F por 1h20-1h40min. Luego de 1h, revisa el nivel de dorado por arriba, si se doró ya lo suficiente, cubre con papel aluminio para protegerla. Para ver que esté cocido, inserta un cuchillo con dientes en la torta, y en los cuchillos debería quedar pegada una masa que se vea como budín de pan o panqueque, no debería estar seco.
Deja que se enfríe por completo y espolvorea con azúcar flor / en polvo / glass.