Si hay un piqueo o picoteo que me ha obsesionado desde hace mucho tiempo es el paté. Desde chiquita era lejos lo que más me gustaba comer cuando los «grandes» se juntaban y casi que no lo compartía. Este paté de pollo ya es casi leyenda entre mis conocidos y es porque es extremadamente rico.
Para combinar mi paté siempre me gusta hacer peras a la miel. Siento que complementa muchísimo el sabor del paté y soy fan del agridulce. Las peras así también son súper buen acompañamiento para quesos fuertes.
Para variar este paté le puedes poner pasas (picadas, hidratadas y agregadas luego de licuar), pimienta verde (1/4 cdta pimienta molida en el paté y más en la mantequilla de encima), nueces (molidas y otras en pedazos, tostadas), etc.
La capa de mantequilla que tiene encima evita que la superficie se oxide y se ponga negra y forme una capa dura. A veces en tiendas gourmet vemos que le ponen gelatina encima y cumple la misma función. La única diferencia para mí es que yo no me como la gelatina pero sí la mantequilla.
Las tostadas de baguette las hago muy seguido para mis picoteos / piqueos y lo único que requieren es ponerle un poco de aceite de oliva y sal y van a un horno precalentado a 180C por unos 6min. Si solo se doran por un lado dales vuelta porque son mejores cuando están muy crocantes.
¿Pueden ver la textura de este paté? Lo amo con pasión y locura. Ah y lo chistoso es que no me gusta el hígado cocido, solo en paté jaja. ¡Es que es lo mejor!
Ingredientes
Para el paté
- aceite de oliva para cocinar
- 300 g hígado de pollo también puede ser de pato
- 50 g cebolla blanca picada
- 2 dientes de ajo rallados, molidos o picados finamente
- 25 ml brandy
- 150 g mantequilla con sal derretida y enfriada a temperatura ambiente. Adicional para sellar los contenedores
- sal y pimienta a gusto
- hojas de tomillo para decorar
Para las peras a la miel
- 2 peras peladas, en rodajas y esas rodajas a la mitad
- 2 cdas miel de abeja
- 2 cdas agua
- 1/2 cdta sal
Elaboración paso a paso
Para el paté
- Limpiar los hígados quitando la membrana que une los dos lóbulos. También quitar excesos de grasa.
- Poner un poco de aceite de oliva en una sartén a fuego medio-alto y sellar los hígados. No llenar la sartén; que tengan espacio entre ellos. Esto evita que se hiervan en lugar de dorarse que es lo que queremos.
- Cocinar los hígados a término medio. Ir sacando y agregando más a la sartén a medida que están listos.
- Echar un poco más de aceite de oliva y cocinar la cebolla a fuego bajo hasta que esté transparente y suave. Usa sus jugos para raspar lo que se haya pegado de los hígados porque está lleno de sabor.
- Agregar el ajo y cocinar por un minuto.
- Agregar el brandy y flambear o dejar que hierva hasta que quede muy poco líquido. Para flambear puedes prender la punta de un papel de cocina enrollado y ponerlo sobre la sartén, se prenderá inmediatamente.
- Poner todo en una licuadora junto con la mantequilla derretida. Licuar.
- Probar el nivel de sal y ajustar.
- Vaciar mezcla en uno o varios contenedores y nivelar con una cuchara.
- Tapar con una capa de mantequilla extra derretida a temperatura ambiente y ponerle la ramita de tomillo de decoración.
Para las peras a la miel
- Cocinar las peras con la miel y el agua hasta que estén muy suaves y casi no quede líquido.
