Las personas que cocinamos todo el tiempo también lavamos todo el tiempo. Es inevitable pero significa que las manos sufren un poco. Lo mismo les pasa a muchas personas que trabajan con las manos o que se las tienen que lavar seguido. Es por eso que ideé este exfoliante que podemos hacer en nuestras casas con solo unos pocos ingredientes. Es riquísimo porque tiene pomelo o toronja y menta que lo hacen muy rico y refrescante. Ah, además es comestible.
El primer día lo usé solamente para las manos y labios. ¡Funciona increíble! En verdad ayuda a sacar toda la piel muerta que se forma cuando trabajamos con las manos. Y mi boca que estaba super seca se puso demasiado linda 🙂 Además cuando terminé de exfoliarme la boca me lo comí jajaja
En general cuando te exfolies tienes que tener cuidado de no tener heridas porque te va a arder. Lo que yo hago cuando mis manos tienen heriditas chiquitas es hidratarlas primero hasta que se haya bajado la inflamación y luego ya me exfolio.
La segunda vez que usé este exfoliante fue en mi cara! Pensé que el azúcar iba a ser demasiado abrasiva para mi cara pero estaba equivocada! Sí tenía que tener cuidado de no pasármela muy fuerte pero además de eso funcionó a la perfección.
Ingredientes
- 10 cdas azúcar blanca
- 1 pomelo o toronja, solo rayadura, muy finita*
- 2 cdas aceite de oliva extra virgen o aceite almendras
- 4-6 hojitas de menta picadas o aceite esencial de menta (opcional)
Elaboración paso a paso
- Mezclar todos los ingredientes y guardar en un pote sellado. Puedes guardarlo hasta 1 mes sellado.
- Poner un poco en tus manos y aplicar a la zona que quieres exfoliar gentilmente y en movimientos circulares.
- Cuando termines enjuaga el área y seca con papel ligeramente para que se quede el aceite hidratando tu piel.